Locales Juárez
“Anita” en el cielo… Su asesino en el penal
Conmociona a todo el estado el rapto y asesinato de la pequeña Ana Lizbeth en la colonia Vistas del Río.
CD. BENITO JUÁREZ, N.L.-
La noche del domingo empezó la pesadilla para la familia Polina Ramírez, ya que la tarde-noche Dulce Edith Ramírez Gutiérrez, madre de la pequeña de ocho años Ana Lizbeth Polina Ramírez, en un poco de tiempo, en un descuido, su hija desapareció de la caseta de la ruta 527, donde la mamá labora.
La mujer empezó a buscar a su hija por los lugares cercanos y hubo quien le dijo que la habían visto con el sujeto antes descrito a quien lo conocen como “El Negro”, quien es taxista.
Empezaron a correr las horas y se dio aviso a la autoridad, quien el lunes por la mañana, lanzó por medio de la Procuraduría la Alerta Amber con la imagen de la pequeña y su presunto secuestrador.
El lunes todo el día empezó la búsqueda entre las autoridades. Ya todo el estado sabía de la desaparición y la noticia tenía en vilo a toda la colonia Vistas del Río, cuyos vecinos hacían mil conjeturas y algunos inventaban historias que en nada ayudaban a la localización de la pequeña, se llegaron las 24 horas de su desaparición y Dulce Edith y Francisco Jesús Polina López, su padre, se encontraban devastados, pero aún con la esperanza que su hija fuera encontrada sana y salva.
Amaneció el martes, la búsqueda continuaba sin resultados, se corrió una imagen donde se presumía aparecía Anita y su captor en una tienda y que se había visto en Apodaca, más todo era falso.
El martes, poco después de las 17:00 horas, fue encontrado el cuerpo de las niña en un terreno baldío, que se encuentra en el cruce de las calles Vistas del Huizache y Vistas de la Anacua, no muy lejos donde fue raptada la menor unas 45 horas antes.
La noticia del hallazgo como corrió como reguero de pólvora y en el lugar se congregaron cientos de curiosos que eran frenados por la banda amarilla de la policía, mientras se hacían los trabajos de levantamiento, indagaciones y pesquisas.
Desde las primeras horas en que se salió la alerta Amber, se desató una cacería contra el presunto secuestrador, que se endureció a partir de que se encontró su cuerpo y hasta se llegó a ofrecer una recompensa de 500 mil pesos a quien diera datos que ayudarían en su localización por parte de la Procuraduría del estado.
Las investigaciones se aceleraron y en un fuerte y numeroso despliegue gracias a datos proporcionados por la ciudadanía, se ubicó y detuvo al taxista y presunto homicida de Anita, y quien fue identificado como Juan Fernando “N”.
Al momento de ser detenido el sospechoso vestía una playera gris y se había rasurado la barba para intentar confundir a las autoridades, pero personas que lo conocen y atraídos por la recompensa dieron los datos para su captura.
Después de ser encontrada el martes a las 17;30 horas aproximadamente del martes, el forense entregó el cuerpo de la pequeña a la familia poco antes del mediodía para ser velada solo por dos horas en la funeraria Martínez de la calle Diego de Montemayor, debido al estado de descomposición en que fue encontrado su cuerpo, para ser sepultada poco después en un panteón cercano a la colonias “Los Reguiletes”.
Anita ya descansa en paz, dejando un mundo de reflexiones sobre el camino que lleva la sociedad actual. Un asesinato muy difícil de evitar y también de prevenirlo por las mentes enfermas de ciertos sujetos que de un momento a otro violan y asesinan. Se concluye el triste y trágico capítulo: Anita ya descansa en paz, pero para su presunto homicida empieza el infierno en el penal del estado.