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Usted tiene… La Última Palabra
Por: Ing. Jesús Herrera Rábago
Espectador
Una de las cosas que más le criticaban a Winston Churchill, primer ministro inglés en tiempos de la Segunda Guerra Mundial, era que cambiaba de idea fácilmente; la respuesta que les daba a sus detractores era: 1) “Mejorar es cambiar; ser perfecto es cambiar a menudo”, 2) “Un fanático es alguien que no puede cambiar de opinión y no quiere cambiar de tema”.
Obvio que no es una idea original, ya el filósofo alemán Inmanuel Kant, mucho tiempo antes, decía: “El sabio puede cambiar de opinión. El necio, nunca”. Sin embargo, para los políticos, siempre será un buen tema para atacarlos.
Esta semana tuve la oportunidad de asistir a la reunión que sostuvo Manuel Andrés López Obrador con empresarios, en su gira por Monterrey. Lo primero que alcancé a percibir es que se ve muy seguro y tranquilo; a diferencia de las dos campañas anterior donde se veía no cómodo, agresivo o inmediatamente se prendía, ahora se ve que la está disfrutando.
Llamó mi atención, también, el hecho de que no hubo ningún filtro para preguntas. Cualquiera que levantaba la mano podía hacerla, lo cual es reflejo de esa seguridad y paz que trae.
A varias preguntas que llevaban jiribilla no las evadió o las defendió con el estilo anterior donde inmediatamente acusaba de un “compló” en su contra, sino usó la lógica. Por ejemplo, cuando le sacan el tema del plantón de Reforma en el 2006, en lugar de hablar del robo de la elección, simplemente dijo que fue una forma de contener y encausar el descontento social.
Independientemente del fondo de sus respuestas, que pueden ser o no creíbles, lo interesante es la forma más inteligente, más razonable y políticamente correcta. Inclusive, al tratar el tema de un posible fraude, simplemente dice que él se irá a su rancho y que quien desate al “Tigre” pues que lo contenga.
Es cierto que muchos pueden pensar que esto no es cierto, que simplemente lo hace por conveniencia e interés ante la elección; pero aun si así fuera, se está comportando de forma diferente, o en otras palabras está dejando de ser necio y por lo tanto, mostrando otra faceta.
No quiero decir con todo esto que sea la mejor opción, lo que constaté es que se está comportando de forma diferente, lo cual puede asegurarle mantenerse. Hay que recordar que siempre se ha dicho que principal enemigo del Peje, es el mismo Peje.
Así las cosas, acepto que me sorprendió su forma de presentarse y, hasta hoy, le doy el beneficio de la duda que verdaderamente ha cambiado; habrá que esperar si así se mantiene hasta el 1 de julio, de hacerlo creo que tiene muchas posibilidades de ganar, por lo pronto está de espectador de la carnicería Meade contra Anaya, lo cual le redituará positivamente a él.
Esta es mi opinión, usted tiene La Última Palabra.