2 mil 500 millones

Por: Ing. Jesus Herrera Rábago

En política, como en cualquier otra confrontación con adversarios, gana más la estrategia y la inteligencia que la fuerza bruta. Dentro de esas estrategias, una de las principales siempre ha sido debilitar a tu enemigo de forma que vaya perdiendo la fortaleza que tenga.
Hace dos días la diputada Tatiana Clouthier y el diputado Mario Moreno, del partido político Morena, anunciaron la presentación de una iniciativa para recortar presupuesto de partidos políticos en 50%. Inmediatamente aparecieron los aplausos y las felicitaciones.
Ningún ciudadano, obviamente que no se vea beneficiado del presupuesto de los partidos, estará en contra de esta medida. Es un tema lógico y de sentido común, pero también de justicia, pues resulta indignante los miles de millones de pesos que los partidos derrochan o acaban llenando los bolsillos de unos cuantos.
El tema además, fue promesa de campaña que ahora simplemente argumentan están cumpliendo. Además que los números son contundentes, en 2019 los partidos políticos recibieron financiamiento de casi cinco mil millones de pesos, y en caso de reformar la Constitución, como indica la propuesta, habría un ahorro de 2 mil 500 millones de pesos.
La estrategia es perfecta, ponen sobre la espada y la pared a los demás partidos políticos, porque si se oponen se verían muy mal y ganarían más el rechazo de la sociedad que reforzaría la idea de lo nefasto que resultan; por otro lado, si la aceptan, pierden dinero que al final de cuenta los debilita.
Es obvio que Morena argumentará que ellos también se verán afectados de la misma manera, o incluso, más que cualquier otro partido, pues con la cantidad de votos en la última elección y los simpatizantes que han sumado tienen derecho a mayor cantidad que se vería menguado. Pero es aquí donde precisamente está la estrategia: hoy a Morena no le interesa el dinero partidista, tiene muchísimos proyectos sociales que le aseguran la simpatía de millones de personas.
Por otro lado, Tatiana Clouthier gana en su camino hacia la gubernatura del 2021, se ve como la mujer inteligente, libre de ataduras partidistas, capaz de desafiar a los mismos Morenistas, cuestión clave para ganar la simpatía del electorado neolonés. Cercana a Andrés Manuel, pero con sana distancia con los “grillos” de Morena.
Así las cosas, certero golpe podría asestar Morena y Andrés Manuel a sus adversarios políticos, si esta reforma se hace realidad. Aunque incluso, si no se llegara a dar, le servirá de moneda de cambio, para negociar con los demás partidos otras cambios constitucionales que le interesen.
Esta es mi opinión, usted tiene La Última Palabra.