Monterrey, N.L.- Tras intentos fallidos y presunta omisión de ser escuchados por la delegada Judith Díaz, ejidatarios del sur y del norte de Nuevo León amenazaron con tomar e incendiar el edificio sede de la delegación estatal del Registro Agrario Nacional (RAN).

A través de una carta enviada a los medios de comunicación, los ejidatarios denunciaron su malestar en contra del delegado del RAN, José Luis Marroquín Aguirre, acusándolo de traficar con información privilegiada en beneficio de desarrolladores particulares, afectando sus tierras.

“Estamos cansados de no ser escuchados, de lo contrario tomaremos la delegación del RAN y protestaremos quemando las instalaciones porque el pueblo es el que manda”, reza la carta firmada por lo menos de 50 rúbricas de los inconformes.

La misiva destaca la amenaza que hacen y en la que señalan que tomarán la delegación ubicada en el cruce de las calles Treviño y Villagómez, en el centro de Monterrey, haciendo disturbios como el quemar parte de las instalaciones.

“Por medio de la presente carta u oficio queremos manifestar nuestro malestar e inconformidad contra el delegado del RAN (Registro Agrario Nacional) en Nuevo León, el cual ha beneficiado a particulares filtrando información confidencial para quitarnos tierras y así beneficiar a particulares”, reza la misiva firmada por Arcadio Buenaventura, Artemio Garza, Gerónimo Pérez, Arquímides García y Leoncio López.

“Pedimos de manera amable que alguien nos ayude a hacer eco en nuestras peticiones, ya que nadie de la Cuarta Transformación nos escucha. Esperamos que esta carta llegue por medio de sus opiniones, notas o algún comentario a los oídos del Presidente Andrés Manuel Lopez Obrador o alguien de su gabinete, y escuche tanta barbaridad de parte del delegado José Luis Marroquín Aguirre y Alfonso de la Cerda, quienes, en contubernio, actúan juntos amedrentando a muchas familias del sur y norte del estado”, se lee en la misiva.

Al final del escrito agregan algunas publicaciones sobre sus quejas y ponen nombres como el del Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, con su cuenta de Twitter, y el de funcionarios federales relacionados en la toma de decisiones para poder cesar al delegado José Luis Marroquín Aguirre.